EL PROFESOR IDEAL

 ¡Hola a todos!

Hoy estoy por aquí para hablaros de uno de los miembros mas importantes del sistema educativo: el profesor. En concreto, me gustaría reflexionar acerca de las cualidades, valores y competencias que habría de tener un buen docente y de como ha de tratar con los alumnos, los padres y los demás profesores. 

En primer lugar, procederé a enumerar las cualidades y valores que ha de poseer un buen profesor. Considero que, fundamentalmente, el buen docente ha de ser una persona empática y comprensible, capaz de ponerse en el lugar del otro. Esto es muy importante ya que ayudara a que se desarrolle una buena relación entre el docente y el alumno, quien verá al profesor como alguien cerca y que muestra preocupación por sus problemas, facilitando así que forme una buena opinión de el, le respete y muestre una buena actitud durante las clases. En cuanto a la relación con las familias, es también fundamental que el profesor se muestre comprensivo respecto a los posibles problemas que puedan surgir en un ámbito familiar y que afecten al rendimiento académico. El docente ha de mostrar una actitud conciliadora entre el ámbito educativo y el familiar para lograr una buena relación entre ambas partes. Lo mismo sucede con el trato y relación con los demás profesores, en que el docente ha de mantener una actitud cordial y amable hacia ellos para evitar conflictos en el centro educativo.

Es también muy importante que un buen docente muestre respeto por sus alumnos y los trate como a iguales, siempre desde una posición de autoridad y como figura orientativa. Esto quiere decir que un profesor nunca ha de humillar a sus alumnos o minusvalorarles cuando, por ejemplo, comenten un error durante las clases: en lugar de burlarse de ellos y humillarlos frente a sus compañeros, el profesor ha de quitarle importancia al error que se ha cometido y asegurar que de los errores también se aprende, fomentando el refuerzo positivo y evitando que el alumno sienta malestar o desmotivación. Lo mismo sucede a la hora de tratar con los padres respecto a un posible conflicto o problema que pueda acontecer con sus hijos en el centro educativo: se les ha de explicar de manera cercana y nunca reprochándoles su actuación como padres o remarcando las cualidades negativas de su hijo. De este modo, el conflicto podrá resolverse de manera adecuada y sin incidencias. 

En cuanto a las competencias del buen docente, considero que lo fundamental es que pueda impartir los conocimientos pertinentes de una manera adecuada, sin aburrir o desmotivar a los alumnos, siendo dinámico y procurando que los alumnos aprendan y disfruten a la vez de sus clases. El profesor ha de encontrar un equilibro entre presentarse como figura autoritaria y cercana a los alumnos: ha de mostrar una actitud distendida pero algo distante, para evitar que los alumnos tomen demasiada confianza y le pierdan el respeto. También fundamental es que el buen docente posea unos conocimientos amplios, una buena capacidad de organización de las lecciones y contenidos, una buena dinámica de trabajo o buen nivel de rendimiento. En conclusión, considero que para ser un buen docente hay que ser, mas que ninguna otra cosa, buena persona: al estar en contacto y tratar con mucha gente, en concreto adolescentes en pleno desarrollo, se les ha de inculcar unos valores sanos y adecuados. Debes conseguir que los alumnos entiendan que hay una serie de cosas que se deben hacer y otras que no se han de hacer bajo ningún concepto. En ocasiones, los alumnos aprenderán por imitación del profesor y por eso es importante que éste sea una figura ejemplar: ¿Qué mejor manera de hacerlo que actuar como modelo de conducta para ellos?

Y vosotros ¿Qué cualidades creéis que habría de tener un buen docente? ¿Habéis tenido algún profesor a quien hayáis admirado?

¡Un saludo y nos leemos pronto!